lunes, 23 de junio de 2008

¡España pasa de Cuartos y el TORERO está en la Final!



Después del alegrón que tuvimos ayer todos los españoles (Pedro, menos la del autobús), esta mañana otra alegría mayor. ¡El Torero ha aprobado el segundo examen!
Que momentazo ha vivido esta mañana, bueno al mediodía. Os cuento:
Por la mañana llamó para saber si ya habían salido las notas del segundo examen; le dijeron que no saldría hoy y que sería a lo largo de la semana.
Pero cuando ya estaba a punto de venirse para Jaén, pensó, ¡tengo algo que hacer y no sé lo que es! y le vino a la cabeza el examen. No llamó, miró por Internet y... ¡Milagro, ya han salido! 
Según me ha contado; lo imprimió y sólo vio dos nombres en esa lista; y ¡uno de ellos era el suyo!. Ante su incredulidad, le ha tenido que decir a uno que se lo leyera, porque no se lo podía creer.
Todavía no puede cantar Victoria, porque aún le falta el final y decisivo. Pero lo que está claro, que nunca se había visto en esta situación.
¡Parece que nuestro equipo español y el Torero bailan al mismo son!
Mucha suerte para España y sobretodo mucha fuerza y ánimo para el Torero.
¡Torero estamos contigo!

1 comentario:

Unknown dijo...

¡Enhorabuena, Torero!

Porque, una vez que se ha bordado la faena de los primeros dos toros, el tercero no va a deslucir. Así que, húndase el Maestro la montera a un dedo de los ojos, mire al astado fijamente, abra en verónica su capote y dele un pase torero que haga saltar las letras del diccionario de inglés como si allí estuvieran de más y cítelas a acudir a su tendido.

Los de la Selección han tenido la buena ocurrencia de pasear el rojo-muleta por las semifinales. La gente del autobús desde Málaga vitoreaba la tarde gloriosa de fútbol con toro azabache en las banderas sonriéndose unos a otros como si se conocieran de toda la vida. Mi vecina de asiento, con la que no crucé una palabra en todo el viaje, al final aplaudía viva de entusiasmo y creo que me habría besado si yo hubiera manifestado más entusiasmo por la gesta. Pero es que yo me reservo para una ocasión de verdad...

...Venga, Maestro, a lo que íbamos...