Este año nos merecemos hacer un crucero, según Torero.
La única referencia que tengo es de mi querida serie "Vacaciones en el mar".
Pero si lo piensas fríamente llegas a la conclusión de que no merece la pena, os cuento:
El crucero creo que dura cuatro días. Y recuerdo de esta, que no había pareja que se embarcara que no se peleara.
Según mis cálculos, el primer día todo irá de maravilla, el segundo es donde van a empezar los problemillas, a eso del mediodía.
Ya me queda de viaje dos días y medio.
El tercer día, por supuesto, hay que seguir peleados, pero por la noche, el enfado se tiene que acabar, para que al día siguiente desembarquemos con cara de bobos y despidiéndonos de la tripulación, porque gracias a ellos hemos podido superar la crisis.
Pero cuando miro la fotografía pienso, "Esta gente me está esperando", me espera el capitán, la relaciones públicas, el médico, el auxiliar y sobretodo el barman. Y esa musiquilla cuando sale del puerto, con el confeti y las serpentinas volando.
¡Esperadnos, que ya subimos!
¿Dónde hay que comprar los billetes?
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1 comentario:
Ah, sí, me acuerdo también de esa serie. Pero como tú eras aún muy niña entonces no sabías ver entre cuadros. Nunca olvidaré la mirada lasciva del doctor cuando rodeaba a la señora joven que andaba a la gresca con su marido y, ajustándose las gafas, susurraba: "¡Lástima de este cuerpo que se van a merendar los tiburones!" Porque ahí estaba el éxito de la terapia de esta siniestra tripulación: primero, se lo pasaban bomba sembrando cicaña en la pareja y luego, hartos ya de tanto fornicio, los reunían para amenazarlos con tirarlos por la borda si no se arreglaban antes de que acabara el episodio. Así cualquiera. Por lo tanto, ojito con las vacaciones en crucero.
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